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Siento que el mundo le queda grande a mi cuerpo, pero pequeño a mi mente. Mi imaginación se vuela hacia la estratosfera y de allí no vuelve hasta pasado un buen rato. Me intimida todo, los perros a un lado de la calzada, las flores arrebatadas de abejas, los libros de suspense y los de realidad absurda. Hablando de eso quiero leer a Bukowski, pero ¡diablos que son caros su condenados libros!, algún día juntaré ese dinero y me compraré uno cuando ya no me intimide el mundo este y cuando me crea con madurez suficiente para entender a un hombrecito así

Eres una bestia,

me dijo ella

con tu blanca panza

y esos pies peludos.

Nunca te cortas las uñas

y tienes manos regordetas

zarpas como de gato

tu narizota colorada y brillosa

y los huevos más grandes

que he visto nunca.

Arrojas esperma

como una ballena arroja agua

por el agujero de su espalda

Bestia bestia bestia

me besa,

Qué quieres para el desayuno?

Tú- Charles Bukowski

¿Ves a lo que me refiero?, aunque tiene sus cosas tiernushonas y mega estructuradas aceptadas de buena gana por este mundo, pero no… yo me quedo con eso irreverente y novedoso de la picardía.-