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Supongo que es tarde… que se caen a pedazos las ilusiones de ayer y el tiempo se escurre entre mis manos como la imagen idílica creada. Imagino que ya hay mucho en juego y muy poco que se pueda hacer como para volver atrás, de este modo se ve solo una respuesta posible e improbable, como la comunicación misma. Quiero, es lo único de lo que tengo certeza, quiero como no había querido hace tiempo. Y es por ese querer que me mata esta incertidumbre. No moriré con un No, seguiré, tal cual hasta ahora, tal vez mejor, tal vez peor, tal vez ni siquiera siga, qué va… nadie sabe nada.

Se me escapan los acordes de una melodía inconclusa. Se me vuelan las grullas desde mi sexo inacabado. Se me fugan los matices desde un cuadro que está por pintarse. Se me arranca la plenitud en un par de palabras.

Hoy ya se hizo brutalmente tarde, solo me queda pensar que desde lo tarde que se me hizo puede ser lo suficientemente temprano para comenzar las tareas de mañana, construir las oportunidades de mañana, esas de comenzar todo de nuevo una vez más.

Interesante? como la vida misma.