… y me da rabia que no entiendan los porque del asunto, ¡si es tan simple!, uno encuentra cosas muy interesantes que nada tiene que ver con la existencia ajena, por ejemplo hoy encontré un extracto de un poema un tanto “tus zonas erróneas” en su forma de expresarse, pero particular ya que el autor se lo dedicaba a el mismo… Me llenó en extremo, me hizo volver a mí de una manera espectacular… Recuerdo que una vez alguien me dijo que nunca dejara pasar un día sin haber vivido una experiencia nueva, sin haberle alegrado el día a un extraño, sin haber experimentado una sensación novedosa, etc. En definitiva me enseñó a nunca arrepentirme de las cosas que hago y a abrazar ese temor de no saber que es lo que me espera, a lanzarme al abismo de la incertidumbre y sorprenderme con lo que me entrega, a nunca caer en el silencio y jamás unirme a los que viven en y de él… y ahora sé de donde sacó todas esas ideas este alguien. Adiós a las estructuras, a los prejuicios mal argumentados y a las cosas rudimentarias, de repente es necesario agregarle un poco de adrenalina a esta vida, nadie tiene el derecho de coartar mi libertad de expresión, ni de vetar mis pensamientos por mas estrambóticos que sean, son míos y eso los hace respetables. ¡Me siento tan bien por la cresta!, no podría desear que las cosas se dieran de otra manera, ya no quiero desear nada… nada más, simplemente soñar, y ser libre, y dejarme llevar por los mejores sueños que proyecte, ¡pero nunca desearlos!, porque el destino perdería su identidad y se picaría conmigo, ahora lo vengo a comprender… Quiero volar y vivir el día, mí día.